viernes, 6 de abril de 2007

Invitación a un suicidio


Acababa de terminar de ver por nosecuantava vez -y siempre por estas fechas- "Quo vadis", fascinado con esos trajes romanos que parecen comprados en Zara y esos decorados que ni en Ikea, cuando, haciendo zapping, me he topado en Tele 5 con un especial de "El buscador" dedicado a la desaparición del niño canario Yéremi. Una hija de la gran puta, enviada especial junto a la casa de los padres del pequeño, ha afirmado que le constaba que estos estaban viendo el programa por la cantidad de datos nuevos que les iba a aportar. He ido al baño -a hacer un pis, no a vomitar, que hubiera sido lo normal- y, al volver, el calvo bastardo del presentador especulaba con que a Yéremi lo hubiera secuestrado una secta satánica para sacrificarlo en uno de sus rituales. Se apoyaba en el testimonio de un presunto experto con cara de retrasado mental según el cual estos grupos estarían detrás de las frecuentísimas desapariciones de niños en Canarias. ¿Y estos son los nuevos -y consoladores- datos para los padres?

Lo curioso es que ni siquiera me he indignado. Será porque soy de los que piensan que en esto de la telebasura tanta culpa tienen los que la emiten como los que la ven, con lo que "El buscador" se estaba limitando a suministrar a las moscas su ración de mierda diaria. Eso sí, he intentado transmitirle telepáticamente al presentador algunas preguntas. ¿De verdad te importa algo Yéremi y su familia? ¿Te has parado a pensar lo que sentiría ésta? ¿Eres de los convencidos del "interés social" de tu trabajo o tienes al menos un atisbo de dignidad para reconocer que, mientras te paguen, como si has de mostrar el cadáver violado de tu madre? ¿Al acabar el programa te irás a tu casa tan contento o de copas, que mañana es fiesta? ¿Podrías tomar ejemplo de Nerón-Peter Ustinov, que, al final de "Quo vadis", decide morir como un verdadero emperador "después de vivir como un monstruo", suicidándose antes de que la plebe, que ha asaltado el palacio, llegue a sus aposentos? ¿Has pensado cuánta audiencia conseguirías con la retransmisión de tu propia muerte? En caso afirmativo, ¿te importaría sufrir?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Acertados comentarios, mi estimado Otis. En esta mierdosa realidad en la que vivimos, se suele vestir de dignidad y profesionalidad lo que no es más que basura enlatada para estúpidos sin vida propia, ansiosos por ver en esas imágenes e historias la "emoción" y el "interés" de los que sus horas carecen.

Lo peor de todo es que esta gentuza te toma por imbécil y se piensa que cualquier cosa que salga por televisión va con sello de autenticidad y nadie se para a pensar en lo que se ve y se oye y se asume como propio.

Por ejemplo, ayer, sin ir más lejos. Apareció en un programa de televisión la "divina" Jennifer López" (retaco con lazos a la que, con sinceridad, no sé qué le ve la gente), que va de latina concienciada por la vida, adalid de los hispanos en Estados Unidos y que tiene los cojonazos de salir diciendo que la historia de los asesinatos en Ciudad Juarez (Tema de su última y, como todas, patética y lamentable película) le impactó enórmemente....tras leer el guión.....ya que hasta entonces ¡¡¡¡¡¡no había oido nada sobre el tema!!!!!!!! ¿Alguien dijo algo? ¿La asociación de hispanos en España pidió el boicot para sus discos y películas? ¿El presentador se largó del escenario no sin antes cruzarle el careto con dos tortas bien dadas? No, claro......y mira que hubiera vendido esa imágen de Jesús Vázquez corriendo a mandobles a la amiga López en directo.Pero no,el programa siguió adelante con mas estupideces.

Esperemos que por lo menos, haya perdido un par de admiradores y otros dos más se dieran cuenta de que la realidad no está en los tubos catódicos que nos rodean.

Otis Driftwood dijo...

Qué gran verdad. El fenómeno Jennifer López me alucina. No sé que le ven, porque ni es el bellezón que dicen (es más, le pones unas plumas y parece Toro Sentado) ni baila ni canta una mierda. Por no hablar de su marido, que parece recién salido de "Corrupción en Miami".

Anónimo dijo...

Lo curioso de todo esto es que nos quejamos de la telebasura, además dices que también tiene su parte de culpa el populacho que está detrás de la caja tonta, pero tú mismo has caído en sus garras y te has tragado parte, si no todo. del progaramita en cuestión. El maravilloso mundo del sensacionailmo!!